Duele el ardiente tizón de los sueños que la realidad destroza,
Y purulentas mis heridas supuran mi venenosa amargura,
El hedor de unas promesas caducas y de rancia ternura,
Sirviendo un jugoso escarnio con dulce mezquindad desastrosa.
Implacable destajo ortigas buscando que bebas el jugo de tu rencor,
Repelente para que desprecies por completo pasar esta puerta,
No quiero que vuelvas ni a mirar siquiera mi ventana abierta,
Que las rosas de mi jardín sean solo espinas y ardor.
Así es porque acogerte aunque me place tu hierro me hiere,
No importa si por ello aguanto el tajo del escándalo y las lenguas malas,
Total tus frías estocadas son más implacables y magnas,
Ahora en un solo empuñe de espada invoco tu desprecio para que no respires mi aire.
Esperando que en otro paisaje sin mas certeza de que cuan ruin fui pueda sanar sin tus cornadas,
En metamorfosis llegar a ser algo mejor que esta ajada oruga de la mezquindad de mi desilusión,
Y que la seda de mi capullo sean mis ropas y alas de este corazón en reparación,
Reforjado más bello y hermoso que antes de este intercambio de mieles y canalladas.
Que en tus nuevos rumbos encuentres al escultor de sueños que yo solo pude dibujar y escribir,
Alguien que vea la lluvia cuando tus ojos lloran en el sangrar de tu alma y el sol naciente al deleite de tus glorias,
Uno que no tropiece en los mismos senderos que lo hice yo cuando seguía tus pasos tan solo buscando ser tus alegrías,
Lamento ser la astilla que se clavo en tu soledad pretendiendo ser el fiel guerrero que te defendía en cada esgrimir…
Y lamento aun más que la grandeza de mi corazón no fuese suficiente para vos.
Y purulentas mis heridas supuran mi venenosa amargura,
El hedor de unas promesas caducas y de rancia ternura,
Sirviendo un jugoso escarnio con dulce mezquindad desastrosa.
Implacable destajo ortigas buscando que bebas el jugo de tu rencor,
Repelente para que desprecies por completo pasar esta puerta,
No quiero que vuelvas ni a mirar siquiera mi ventana abierta,
Que las rosas de mi jardín sean solo espinas y ardor.
Así es porque acogerte aunque me place tu hierro me hiere,
No importa si por ello aguanto el tajo del escándalo y las lenguas malas,
Total tus frías estocadas son más implacables y magnas,
Ahora en un solo empuñe de espada invoco tu desprecio para que no respires mi aire.
Esperando que en otro paisaje sin mas certeza de que cuan ruin fui pueda sanar sin tus cornadas,
En metamorfosis llegar a ser algo mejor que esta ajada oruga de la mezquindad de mi desilusión,
Y que la seda de mi capullo sean mis ropas y alas de este corazón en reparación,
Reforjado más bello y hermoso que antes de este intercambio de mieles y canalladas.
Que en tus nuevos rumbos encuentres al escultor de sueños que yo solo pude dibujar y escribir,
Alguien que vea la lluvia cuando tus ojos lloran en el sangrar de tu alma y el sol naciente al deleite de tus glorias,
Uno que no tropiece en los mismos senderos que lo hice yo cuando seguía tus pasos tan solo buscando ser tus alegrías,
Lamento ser la astilla que se clavo en tu soledad pretendiendo ser el fiel guerrero que te defendía en cada esgrimir…
Y lamento aun más que la grandeza de mi corazón no fuese suficiente para vos.
3 comentarios:
Otra vez será.
Saludos,
hermoso poema. y se por que lo escribio y que queria expresar y eso lo expresaste. y me gusto mucho la ultima frase: y lamento aun mas que la grande za de mi corazon no fuese suficiente para vos.
Bueno, primera vez que visito su blog, pero tamaño post con el que me he encontrado, como dice Goblin, grande esa frase con la que remata "Lamento aún más que la grandeza de mi corazón no fuese suficiente para vos", bienvenido al club...(:S)
Espero seguirlo leyendo, calidad brota de sus letras...
Excelente post
Pridamo
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